Viagra, también conocida como sildenafilo, es un medicamento ampliamente reconocido que se utiliza para tratar la disfunción eréctil (DE) en hombres mayores de 18 años. La disfunción eréctil puede afectar física y emocionalmente a las personas afectadas y a sus parejas, provocando sentimientos de ira, frustración, tristeza o falta de confianza. Sin embargo, esta afección es tratable y el Viagra ha demostrado su eficacia en varios estudios clínicos.
Los estudios clínicos han demostrado que Viagra es eficaz en el tratamiento de la disfunción eréctil en varones, con una mejora de la capacidad de tener y mantener erecciones adecuadas para mantener relaciones sexuales satisfactorias. En estos estudios, entre el 43% y el 83% de las personas que tomaron Viagra experimentaron una mejora de la erección.
La eficacia de Viagra puede disminuir en individuos con arterias estrechas, ya que el medicamento puede no ser lo suficientemente fuerte como para hacer su magia en estos casos.
Viagra funciona de forma similar a los medicamentos que contienen nitratos, y no se recomienda para los hombres que toman nitratos para la enfermedad cardíaca o aquellos con ciertas otras condiciones del corazón.
No todos los hombres que prueban Viagra experimentan mejoras en la función eréctil. Algunos hombres pueden no obtener ningún beneficio del uso del medicamento, mientras que otros pueden descubrir que deja de funcionar gradualmente después de haber tenido éxito inicialmente.
Si el Viagra no funciona, puede deberse a una dosis demasiado baja. La dosis inicial habitual de Viagra es de 50 mg, pero algunas personas pueden empezar con una dosis más baja de 25 mg si están tomando ciertos medicamentos. La dosis máxima de Viagra es de 100 mg, pero el médico puede recetar una dosis más alta si es seguro.
Los cambios en el estilo de vida también pueden ayudar a mejorar la eficacia de Viagra en el tratamiento de la disfunción eréctil.
Los hombres con disfunción eréctil pueden beneficiarse del trabajo con un terapeuta para abordar el impacto emocional de la enfermedad y mejorar los resultados del tratamiento.
El sildenafilo (Viagra), el vardenafilo (Levitra, Staxyn), el tadalafilo (Cialis) y el avanafilo (Stendra) son medicamentos orales que revierten la disfunción eréctil aumentando el flujo sanguíneo.
Si Viagra no resulta eficaz, otros medicamentos de esta clase pueden ser alternativas adecuadas.
Si un medicamento recetado para la disfunción eréctil no funciona como se esperaba, es esencial consultar a un profesional sanitario para obtener ayuda. Un profesional sanitario puede ayudar a mejorar los resultados del tratamiento ajustando la dosis, modificando el uso del medicamento o sugiriendo un tratamiento alternativo para la disfunción eréctil.
Los hombres deben evitar tomar cualquier medicamento que afirme ser el equivalente "a base de hierbas" o sin receta de un medicamento oral para la disfunción eréctil, ya que estos productos pueden no ser eficaces o seguros.
En conclusión, aunque la Viagra ha demostrado su eficacia en el tratamiento de la disfunción eréctil en muchos hombres, no funciona en todo el mundo. Factores como las afecciones arteriales, las interacciones con otros medicamentos y las diferencias individuales pueden influir en la eficacia de Viagra. Colaborando estrechamente con un profesional sanitario y explorando diversas opciones de tratamiento, la mayoría de los hombres pueden encontrar una solución que les ayude a conseguir y mantener una erección adecuada para la actividad sexual.